Una expresión cargada de humor que sigue teniendo gran éxito en el léxico español actual. Pero, ¿qué quiere decir exactamente? ¡Veámoslo a continuación!
La expresión y su significado
Cuando una persona se dirige a otra diciéndole que “no tiene abuela”, no se trata de una expresión literal (puesto que puede que sí la tenga), sino que está apelando de forma crítica y cómica a su vanidad o falta de modestia. Suele emplearse cuando algún amigo o familiar se elogia a sí mismo, o alaba alguna de sus cualidades, trabajo o apariencia, y se les dice, en tono cariñoso, que “no tienen abuela.”
La etimología de la locución
Este conjunto de tres palabras tiene su origen en, precisamente, las abuelas, palabra clave de la expresión. Las abuelas son conocidas por su incombustible ristra de elogios e inexhaustible cariño y alta consideración hacia sus nietos, quienes para ellas son los mejores del mundo en todo. Por lo tanto, no es de extrañar que cuando alguien reciba tal expresión, sea por elogiarse y decir cosas buenas de sí mismo, por lo que parece que no tiene una abuela que se encargue de halagarlo.
Un ejemplo
Gracias al corpus de refranes dialogados recogido por el Centro Virtual Cervantes, encontramos un ejemplo en asturiano traducido al castellano de la expresión estudiada, el cual contextualiza muy bien lo que se ha querido expresar anteriormente:
“1027. Alábate, borona, que nun hai quien te coma; Como nun tengo güela, alábome sola [Alábate, borona, que no hay quien te coma; Como no tengo abuela, me alabo sola].”
Esta expresión es tan buena, ¡que no le hace falta tener abuela!
Esta divertida e irónica expresión popular no ha dejado de utilizarse en España desde el siglo XV ni perdido su significado original. Veamos pues una explicación de su significado y exploremos su origen más de cerca.
Significado de la locución
“A buenas horas, mangas verdes” se utiliza para criticar la impuntualidad de alguien, o para decirle que no ha llegado a tiempo para resolver una cuestión y ya no necesitas su ayuda. “A buenas horas” quiere decir en realidad “demasiado tarde”, mientras que “mangas verdes” hace referencia a alguien que llevaba una vestimenta con mangas de color verde. Pero, ¿a qué época pertenecían estas mangas?
Una expresión de origen medieval
Diversas fuentes expertas en lingüística sitúan su origen en la época de los Reyes Católicos, concretamente en 1476 con la creación de la Santa Hermandad, un cuerpo de soldados cuadrilleros cuya misión era acudir al auxilio de los habitantes y castigar los delitos cometidos por los malhechores. Sin embargo, los soldados tenían fama de no llegar nunca a tiempo de resolver los altercados producidos, cuando la emergencia ya no tenía remedio o había sido resuelta por los implicados. Por esta razón, estas impuntuales autoridades eran recibidas por los vecinos con esta expresión, haciendo alusión a su uniforme con mangas de color verde.
Un ejemplo
Encontramos un acertado ejemplo de esta célebre expresión en un extracto de Misericordia, novela de Benito Pérez Galdós publicada en 1897, que dice así:
«–¡Qué le importarán a ese corazón de piedra la madre ni los hijos! ¡Un hombre que tiene en Madrid treinta y cuatro casas […]; un hombre que ha ganado dinerales haciendo contrabando de géneros, untando a los de la Aduana y engañando a medio mundo, venirse ahora con cariñitos! A buenas horas, mangas verdes…»
Todo a tiempo debes hacer… ¡si un “mangas verdes” no quieres ser!